La obesidad y el sobrepeso son problemas en nuestros gatos muy a tener en cuenta pues sus consecuencias pueden ser muy graves en su salud. Conoce sus causas, qué puedes hacer y cómo las flores de Bach pueden ser muy útiles para apoyar su manejo.

Un gato gordo no es divertido ni es gracioso. La obesidad es un problema de salud significativo que afecta a un número creciente de gatos domésticos, especialmente a aquellos que no tienen acceso al exterior, y que debe ser tomado muy en serio.

En este artículo conocerás las causas y consecuencias de la obesidad felina y cómo las flores de Bach pueden ser una herramienta complementaria en el manejo de este problema.

Empecemos por el principio… ¿Es lo mismo sobrepeso que obesidad?

No, no es lo mismo pero no por eso debemos de dejar de darle importancia. El sobrepeso hace referencia a un exceso de peso en tu gato que supera entre un 1% y un 19% su peso ideal. Claro, te preguntarás cuál es el peso ideal de tu gato. Como referencia, te dejo estos datos orientativos del peso ideal para un gato adulto:

• Gato común europeo: entre 3,6 y 4,5 kg.
• Gato persa: entre 3 y 5,5 kg.
• Gato siamés: entre 2 y 4,5 kg.
• Gato bosque de Noruega: entre 3 y 9 kg.
• Gato british shorthair: entre 6 y 8 kg.
• Gato siberiano: entre 4 y 9 kg.
• Gato Maine Coon: entre 4,5 y 11 kg.
• Gato ragdoll: entre 4,5 y 9 kg.

Entonces, ¿Qué es la obesidad en los gatos?

Un gato se considera obeso cuando su peso supera en un 20% o más su peso ideal. Por ejemplo, si el peso considerado ideal para un gato es de 5 kg, con 6 kg padecerá obesidad. Al contrario de lo que se suele pensar, la obesidad no se debe a la cantidad de calorías que ingiere nuestro gato al día sino a la correlación entre la ingesta de calorías y el gasto calórico. Gatos que no hacen ejercicio y que carecen de un entorno en el hogar poco enriquecido serán candidatos al sobrepeso y la obesidad. Ten muy presente que el exceso de peso en tu gato puede conducir a diversas complicaciones de salud, como diabetes, enfermedades cardíacas y problemas articulares.

La WSAVA (World Small Animal Veterinary Association) nos habla de una serie de parámetros que te ayudarán a establecer el grado de exceso de peso de tu gato. Estos parámetros son:

• La existencia de cintura marcada.
• La visualización de las costillas.
• La presencia de grasa a la palpación.
• La aparición de grasa colgante en el abdomen.

Enumeraremos las más comunes:

1. Alimentación inadecuada o de baja calidad: Los amantes de los felinos suelen pensar frecuentemente en el pienso seco como la opción más adecuada para su gato pero desde luego no todos los piensos del mercado cubren las necesidades nutricionales de tu gato ni su composición siempre es la adecuada y este puede ser un factor determinante en el sobrepeso u obesidad de tu gato. Los gatos son carnívoros por naturaleza, son carnívoros estrictos, por lo que la  alimentación seca  que ofrezcas a tu gato deberá contener proteínas frescas de alta calidad como ingrediente principal en un alto porcentaje, evitando las harinas y los cereales. Además tu gato deberá siempre tener acceso a diferentes puntos de agua en la casa. Recuerda que una buena alimentación es la clave para que tu gato disfrute de una vida larga y saludable. Decantarnos por una dieta húmeda, cocinada o BARF (siempre elaboradas para que aporten todos los nutrientes que tu gato necesita diariamente así como equilibradas calóricamente de acuerdo a las necesidades de tu gato) son opciones más favorables para tu compañero felino para evitar el sobrepeso y la obesidad pero los que vivimos con gatos sabemos que la introducción de nuevos sabores y texturas no siempre es exitosa así que ofrecer e incorporar esta  nueva dieta deberá ser muy progresivo y bajo la supervisión de tu veterinario.
2. Alimentación excesiva: La sobrealimentación es una causa común de obesidad. Esto incluye tanto la cantidad de comida proporcionada como la calidad de la misma. En muchas ocasiones, los cuidadores de los gatos mantienen las mismas pautas para el suministro de alimento que mantienen para los perros. Esto es, les ofrecen «una ración de su alimento» una, dos o tres veces al día pensando que así su gato no aumentará de peso y se mantendrá en el peso ideal. Pues no es así. Este patrón provocará estrés, sobrepeso y obesidad en el gato. Tu compañero gatuno deben tener acceso libre a la comida 24 horas al día. El gato no se gestiona igual que el perro. Accederá al alimento, depende de cada gato, varias veces al día ingiriendo pequeñas cantidades y regulando así su ingesta de calorías en cada incursión siempre que no haya ninguna causa que lo haga ingerir más calorías de las que precisa. ¿Qué ocurre si lo alimentas siguiendo el patrón que seguirías con tu perro? Pues, como dijimos, primero esto le generará estrés porque esta no es la forma en la que el gato se alimenta en la naturaleza. Segundo, al principio comerá menos de lo que necesita pero cuando entienda que la comida sólo está disponible una, dos o tres veces al día, comerá todo lo que le sea posible aunque no lo necesite porque entenderá que el alimento sólo es accesible en esos momentos de día. Esto además de estrés, como antes mencionamos, propiciará sobrepeso  que puede derivar en un gato obeso.
3. Falta de ejercicio: Los gatos que no tienen suficiente actividad física tienden a ganar peso. La vida en interiores, sin acceso a estímulos naturales, puede contribuir a un estilo de vida sedentario. Es importante preguntarse cuánto tiempo dedico a jugar con mi gato, cuánto lo estimulo a jugar y a ejercitarse y qué clase de enriquecimiento ambiental le estoy ofreciendo y proporcionando a mi gato. El ejercicio es fundamental junto con una dieta equilibrada y apropiada para nuestro gato para que conserve un peso saludable. El sobrepeso y la obesidad en tu gato han de tomarse muy en serio pues pueden poner en riesgo su salud. Si sospechas o no sabes determinar si tu gato está más gordo de lo que debería, consulta a tu veterinario.
4. Problemas médicos: Algunas condiciones médicas, como el hipotiroidismo, pueden causar aumento de peso. Si la alimentación es equilibrada y la ingesta de calorías es la adecuada pero aún así tu gato está dando muestras de sobrepeso, acude al veterinario puede haber causas subyacentes como el hipotiroidismo que deben ser atendidas de inmediato.
5. Factores genéticos: Por supuesto, no olvidemos que algunas razas de gatos son más propensas a la obesidad que otras. Las manipulaciones genéticas de la mano del hombre para modificar las razas de gatos también son las responsables de que algunos gatos sean más propensos al sobrepeso y la obesidad.

Hablemos de las consecuencias de la obesidad en los gatos

Claro, la obesidad, igual que ocurre en los animales humanos afecta al funcionamiento del resto del organismo. Entre las afecciones más comunes asociadas al sobrepeso y la obesidad vemos:

1. Diabetes mellitus: Los gatos obesos tienen un riesgo mucho mayor de desarrollar diabetes.
2. Enfermedades cardíacas: El exceso de peso puede llevar a problemas cardíacos y respiratorios. Un peso equilibrado es sinónimo de una corazón sano.
3. Problemas articulares: La obesidad puede causar o empeorar la artritis y otros problemas articulares.
4. Menor calidad de vida: Un gato gordo, con sobrepeso, puede tener dificultades para moverse, jugar y realizar actividades cotidianas, lo que afecta su bienestar general.

Manos a la obra

 Cuando nuestro gato tiene sobrepeso o nuestro veterinario diagnosticó un cuadro de la obesidad en nuestro gato, hay tres factores importantes a tener en cuenta y poner en práctica sin demora:

1. Dieta adecuada: Será nuestro veterinario quien establecerá la dieta más equilibrada y apropiada para nuestro compañero felino y, no olvidemos que aquí, controlar las porciones es crucial para que nuestro gato comience a regular su metabolismo y pueda bajar de peso de forma progresiva y con el menor estrés para él.
2. Ejercicio: Como medida para contrarrestar la obesidad y el sobrepeso felino incrementar la actividad física mediante juegos interactivos y juguetes que fomenten el movimiento es parte importante del plan de acción. Tu implicación aquí es muy importante. Ayudar a tu gato a que deje de ser gordito requiere también que le dediques tiempo al juego con él. Recuerda que esto además de ayudar a tu gato a regular su peso, fomenta el vínculo entre ambos. Los juegos  y el enriquecimiento ambiental para él, «gatificar» la casa, es parte de un plan exitoso no sólo a nivel físico sino también mental y emocional. Los gatos también se aburren.
3. Seguimiento veterinario: Hay que llevar un control regular mediante chequeos veterinarios para monitorear el peso y la salud general de tu gato. Será tu veterinario quien te asesore sobre su evolución, la necesidad o no de mantener la dieta y las pautas indicadas para que tu gato deje de estar gordo y los siguientes pasos a dar en el plan anti obesidad que haya elaborado para tu gato.

Las flores de Bach y su uso en el sobrepeso y la obesidad felina

Las flores de Bach son una terapia complementaria basada en esencias florales desarrollada por el Dr. Edward Bach en la década de 1930. Ya te he hablado en otros artículos sobre su versatilidad y ámbitos de aplicación. Las utilizamos para tratar problemas emocionales y de comportamiento tanto en humanos como en animales. Aunque no hay estudios científicos concluyentes que respalden su eficacia específica para la obesidad, algunas flores de Bach sí que pueden ayudar a abordar los factores emocionales subyacentes que contribuyen al sobrepeso en los gatos.

Te dejo aquí algunas de las Flores de Bach recomendadas para  el tratamiento de gatos obesos:

1. Crab Apple: Conocida como la flor de la limpieza, puede ser útil para los gatos que se sienten incómodos con su apariencia física debido al sobrepeso. Nuestros gatos recogen nuestro sentir y nuestra mirada. Dirigirnos a él mofándonos o utilizando términos que implican rechazo, desprecio o burla pueden hacerle sentir mal con su aspecto y su físico.
2. Chestnut Bud: Ayuda a romper patrones de comportamiento repetitivos, como la sobrealimentación.
3. Cherry Plum: Ayuda en comportamientos explosivos así que puede ser beneficiosa para los gatos que comen de manera compulsiva, ayudándoles a recuperar el control.
4. Walnut: Incorporamos esta flor para aquellos gatos que tienen dificultades para adaptarse a cambios en su dieta o rutina de ejercicio.
5. Gentian: Ayuda a combatir la desesperanza y la falta de motivación, lo cual puede ser útil en gatos que parecen apáticos y poco activos o cuando recogen de sus compañeros humanos la mirada desmotivada o la falta de esperanza en que su gato pierda peso y recupere su salud.

Te comparto un caso del uso de flores de Bach en una gatita obesa:

Nuestra gatita se llama  Mia. Mia es una gata de 8 años con sobrepeso. Vida tranquila y sedentaria en un ambiente tranquilo (en casa conviven ella y su humana quien pasa bastante tiempo fuera de casa. Con un ambiente poco enriquecido y poca interacción). Desde hace un par de años, su compañera humana nota un leve aumento de peso que ha ido derivando en una Mia gordita que en la actualidad tiene un sobrepeso considerable. Tras visita al veterinario, quien ha recomendado una dieta especial y más ejercicio, su responsable, Susana, se pone en contacto con nosotros. Tras una primera consulta y valorar tanto la situación, rutinas, relación de Mia y Susana y las emociones de ambas, elegimos un grupo inicial de 6 flores de Bach para comenzar el trabajo. Tras valoración y testaje junto a Mia, de esas 6 flores inicialmente seleccionadas para trabajar su obesidad, estas quedan reducidas a:

1. Crab Apple: para su incomodidad con su peso

2. Walnut: para ayudarla a adaptarse a los cambios en su rutina

3. Gentian: para motivarla a estar más activa.

Después de 3 semanas de apoyo con el tratamiento floral de Bach, Mia muestra signos de mejora: está más activa y su peso comienza a reducirse gradualmente.

La obesidad en los gatos es un problema serio que requiere un enfoque integral. Además de una dieta equilibrada y ejercicio, las flores de Bach pueden ofrecer un apoyo adicional al abordar los aspectos emocionales del sobrepeso. Aunque no sustituyen el tratamiento veterinario convencional, estas esencias pueden ser una herramienta valiosa para mejorar el bienestar general de los gatos obesos. Consultar con un veterinario y observar de cerca los cambios en el comportamiento y la salud del gato son pasos fundamentales para garantizar un tratamiento seguro y efectivo.

Marina Griñán. Tierra Felina

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